miércoles, 30 de enero de 2008

I´m a little dinosaur



-What can I tell about him?
-Nothing, he´s the best.

martes, 29 de enero de 2008

Vila-Matas


Es él.
Un genio de la letra impresa que lejos de disfrazarse de gran dama de la literatura y pasearse por los salones de la inculta cultura española, se aleja, se esconde, se aparta de los aduladores y, cual alma de Walser todavía en la Tierra, deambula por el mundo échandose a la cuneta de lo desconocido
cuando la fama le sale al paso con focos cegadores.

"Nadie me ha tratado bien, salvo Paula de Parma y mi madre"
Y ya está. Simple y contundente. No hacen falta piruetas de adjetivos, ni montañas de adverbios para ser un buen escritor: sólo las palabras justas y necesarias.

"Intento joder a todo el mundo apareciendo como un gran escritor"
Y lo consigue.
Las llagas se extienden por los pérfidos anos de lamentables literatos que pululan por las librerías. Cuando le ven se les encoge el escroto, el pene huye hacia los pulmones en busca de cobijo, la garganta emite chillidos espasmódicos y desgarradores, las manos se retuercen de angustia porque de sus lentos y torpes movimientos nunca saldrán frases como esta:

"¿Y no habrá otra muerte en el paraíso?"

Y te hunde, te machaca, te rompe los vacuos esquemas que la sociedad había esculpido a golpe de navajazo en tu cerebro.
Y si hay otra muerte en el paraíso?
Y si la vida en la tierra es el paso hacia la muerte en el paraíso?
Y si después del paraíso no hay nada?
Por qué vivir entonces?
Por qué tanta mentira?

Se desliza sigilosamente entre las lineas de tinta negra como serpiente silenciosa que consigue que Eva pruebe el pecado.
Nos lleva de un paisaje a otro, de una vida a otra, de una palabra a otra, sin que percibamos apenas los cambios de temperatura, de forma, de significado.
Todo en su narrativa fluye, con drásticos y violentos cambios de corriente, con saltos de agua que nos lanzan hacia la nada, pero nos dejamos llevar guiados de su Nada.

Nunca podré ir a Paris.
Si lo hago, me veré obligado a recorrer hasta la extenuación la Rue Vaneau, deseoso de penetrar en todos sus rincones, de abordar cual enagenado a sus habitantes en busca de la embajada Siria, del electrizante campo magnético que de ella se difunde por toda la zona.
Y perderme desquiciado entre la gente.

Buscar a gritos la casa de Marx, palpar las bonitas cortinas burguesas en las que de vez en cuando apoyaría la cabeza para seguir tramando la forma perfecta a través de la cual acabar con la burguesía. Sentarme en los sillones en los que posó sus ilustres posaderas el padre de la revolución y rozar mi cara contra la tela que los cubra en busca de un último epitelio, un último cabello, un último resto aerofágico del susodicho Padre-Camarada que me haga volver a creer en la revolución.
En Él.

Y que decir de la mansión en la que habitó Saint-Exupery.
Entrar en ella al galope y recorrer todas las estancias en busca de un pequeño y extraño ser, de un bello e ingenuo cuerpo débil de suave piel blancuzca, del único Príncipe republicano por el que uno renunciaría a la libertad y se postraría complacido a sus pies aceptando sus sabios mandatos, del pequeño planeta en el que recuperar la inocencia que la vida se ha llevado a base de patadas en los genitales.
Volver a soñar.
En algún armario, en alguna alcoba abandonada, detrás de alguna secreta puerta, bajo alguna escondida trampilla, un ínfimo planeta se despierta cada día con el sonido de las débiles pisadas de un Principito que dirije sus pasos hacia el caprichoso rosal que amamanta cada día para poder sufrir sus inquinias y desdenes.
Alcanzarlo con la mano temeroso de poder aplastarle sin querer, besar su frente y susurrar a su delicado oído: gracias por hacerme creer en una humanidad
inexsitente.

Y la lujuria?
Qué decir de la lujuria?
No habrá, acaso, en tan perfecta rue un hotel de la lujuria en el que disfrutar del sexo con todo el cuerpo
y no solo con un falo cercenado por la perversidad vital de un cuerpo desgarrador
de la más débil moral crouzoniana?
Dejarse llevar por la marea de manos inocentes que exploran el abismo del placer
en busca de una nada eyaculadora de otra nada,
manos impúdicas,
violentas,
coquetas,
refinadas,
huesudas,
perspicaces,
afiladas,
y estallar de placer a golpe de arañazos.

En honor a Gide,
descender hasta los sótanos del Vaticano en busca de algún paliducho discípulo
del Sumo Pontífice
para adentrarle en las marabillas de la pecaminosa lujuria cardenalicia.
Jugar a esconder tras la mitra papal
la fuente del placer,
a rasgar con los dientes la pureza del cíngulo*,
a manchar de blanco el alba* con la simiente originaria del hombre,
hacer del báculo el instrumento que lo guíe
cual cordero sumiso
a la Tierra Prometida.
Coronar de púrpura la efigie de la última mártir de la Iglesia,
nuestra hermana
Libertad.

Y ahora qué?
Ahora nada.
Se acaba.
O tampoco os han dicho que se acaba?
"Se acaba y ya está"











* cíngulo: especie de citurón que sujeta el alba
* alba: túnica de este color que sujeta a la cintura con el cíngulo, simboliza la pureza del sacerdote que la lleva al altar
FOTO:Vila-Matas, París, chaquetón granate, lo recuerda Doctor Pasavento?

lunes, 28 de enero de 2008

Pavese

EL DIOS CABRÍO

El campo es un lugar de verdes misterios para el muchacho que llega en verano.
A la cabra, que muerde
ciertas flores se le hincha el vientre y es preciso que corra.
Cuando el hombre ha gozado con alguna muchacha
-tienen pelo ahí abajo-
el niño le hincha el vientre.
Pastando las cabras se hacen brabatas y burlas,
pero al crepúsculo cada uno comienza a mirar tras de sí.
Los muchachos saben cuando pasó la culebra
por el rastro sinuoso que queda en la tierra.
Pero ninguno sabe si pasa la culebra entre la hierba.
Hay cabras que van a ponerse sobre la culebra, en la hierba, y que gozan haciéndose sorber.
Las muchachas también gozan, dejándose tocar.
Al alzarse la luna, las cabras ya no están quietas,
pero es preciso recogerlas y empujarlas a casa
de otro modo se excita el cabrón. Saltando en el prado
destripa a todas las cabras y desaparece. Muchachas en celo
dentro de los bosques van solas, de noche,
y el cabrón, si gritan tendidas en la hierba, acude a montarlas.
Pero en cuanto despunta la luna, se alza y las destripa.
Y los perros que ladran bajo la luna,
es porque han oído al cabrón que salta
en las cumbres de los cerros, y olfatea el olor a sangre.
Y las bestias se agitan dentro de los corrales.
Solamente los perros más fuertes mordisquean la cuerda
y algunos se liberan y corren a seguir al cabrón,
que los salpica y embriaga con sangre más roja que el fuego,
y después bailan todos de pie y ladran a la luna.

Cuando, de día, el gran perro vuelve pelado y arisco,
los aldeanos, patada en el trasero, le entregan la perra.
Y a la hija, que sale de noche, y a los chicos que vuelven
ya oscuro, perdida una cabra, les dan pescozones.
Preñan mujeres los aldeanos, y estorban sin respeto.
Pasean de día y de noche y no tienen miedo
de cavar hasta bajo la luna o de encender un fuego
de rastrojos en los oscuro. Por eso, la tierra
es tan bella y tan verde y, labrada, presenta el color,
bajo el alba, de rostros quemados. Se va a la vendimia
y se come y se canta; se va a desgranar el maíz
y se baila y se bebe. Se oyen muchachas que ríen,
y alguna recuerda al cabrón. Arriba, en la cima, en los bosques,
entre escarpas rocosas, los aldeanos lo han visto,
buscaba a la cabra y golpeaba con la cabeza en los troncos.
Porque, cuando una bestia no sabe trabajar
y se tiene tan sólo para la remonta, le place destruir.
(1933)

De Lavorare stanca (Trabajar cansa)

viernes, 25 de enero de 2008

Internés

La era de las telecomunicaciones dá paso a la era de los contenidos absolutamente intrascendentes que saturan la red.

Millones de páginas llenas de auténtica basura que no tiene otra finalidad que demostrar al mojigato y estupidizado público que las lee que su autor forma parte del mundo moderno por el simple hecho de saber utilizar instrumentos tecnológicos propios del siglo XXI.

Lanzados a la satisfacción del ego personal, escribimos infinidad de gilipolleces en blogs, fotologs... discutimos sobre temas estúpidos en ridículos foros que se presentan como cajas de contenidos de gente de cultura, cuando la gente que los utiliza no tiene más cultura que la del Bollycao (cualquier mierda bien revestida de chocolate es buena [el bollycao], cualquier texto con una buena foto y un bonito diseño de la página en la que se cuelga es interesante)

Estupidizados, utilizamos poderosos instrumentos de comunicación para comunicarnos con la parte más chusca de nosotros mismos: pasamos horas ante el ordenador hablando por el messenger y cuando tenemos delante a aquel con el que habíamos estado messengereando unas horas antes no sabemos ni qué decirle (¿hemos dejado de hablarnos a la cara para pasar a escondernos tras las pantallas del ordenador?); vertemos infinidad de contenidos absurdos en espacios que podían ser aprovechados para fines más interesantes que las autofelaciones blogeras y fotologeras ( miren! miren! miren que bien escribo! he sido capaz de poner unas cuantas letras al lado de una foto y ya soy todo un poeta! Cuánto tardarán en darme el Nobel de literatura?)

Pero no pasa nada, somos el ser humano, esa extraña especie capaz de hacer grandes descubrimientos para encuadernarlos en cualquiera enciclopedia y después jugar con ellos a la insensatez. A perder el tiempo. A desligarnos de nuestra ridícula vida real e inventarnos una vida de poetisa de fotolog color rosa chillón, de futuro escritor de culto que comenzó relatando sus patéticas borracheras en el Avante en un blog rojo de letras verdes...

Hay excepciones. Lo sé. Pero pocas. Y son esas pocas excepciones las que uno visita casi a diario para acordarse de que algunos seres humanos sí merecen estar vivos, sí utlizan sus cerebros para dar al mundo lo que el mundo les reclama y necesita: mentes despiertas y creativas, capaces de utilizar la masa gris en favor de la inteligencia.

domingo, 20 de enero de 2008

Cualquier religión es una máquina de represión


Noticia de El Pais*: una serie de intelectuales marroquíes firman un manifiesto en contra de la persecución de los homosexuales en Marruecos.


Esta noticia será utilizada por los nazionalfascistas españoles y del resto del occidente cristiano para justificar su odio y desprecio a los países árabes, como es utilizado por la derecha española el hecho de que en Egipto lapiden homosexuales a la hora de criticar la llamada Alianza de civilizaciones (criticable por infinidad de motivos, pero criticable desde posiciones progresistas y no desde la perspectiva de los rabiosos ultraderechistas copeanos y del mundo pedrojotesco)


Pero solo se acuerdan de las libertades sexuales cuando toca azotar a los infieles moros. No se lanzan al cuello de la inquisitorial iglesia española cuando ésta publica pastorales homófobas en las que se argumenta que la homosexualidad es el principal problema de la sociedad española, ya que, según las brillantes mentes púrpura, dado que los homosexuales "no pueden tener hijos" y son unos perversos que intentan reconvertir a todos los heteros en homos, en un futuro la simpar y noble raza española habría desaparecido de la península. Tampoco afilan los dientes para desgarrar la yugular de los mañosos "periodistas" que utilizan las letras del abcdario con la finalidad de difamar, equiparando la homosexualidad con la pederastia.


La Iglesia española no es más democrática que las autoridades religiosas y políticas musulmanas. Simplemente, su voluntad represora se ve retenida por un muro de contención: una sociedad española más tolerante que ayer, y un estado aconfesional que protege, no lo suficiente, a los pecadores de los azotes de nuestros párrocos siempre preocupados por salvar nuestras almas.


Cualquier religión es, en su esencia, una máquina de represión de las libertades individuales, y por ello, un anacronismo a erradicar.


El día en que textos como la Biblia, el Corán o la Torah (los escribo en mayúscula pues es la forma en la que se escriben los títulos de las obras literarias en castellano) sean considerados textos mitológicos en los que se basaron antiguas culturas para asentar en ellos sus preceptos morales y de convivencia social, y no textos sagrados que deban marcar las conductas individuales y colectivas del ser humano del siglo XXI, ese día, la especie humana habrá conseguido extirpar de su mente un gran pedazo de ignorancia y sabrá, libre de cualquier atadura pseudomoral como la religión, crear sociedades de individuos verdaderamente libres y justos.


Pero no reduzcamos nuestra crítica a los textos religiosos, pues tampoco necesitamos otro tipo de biblias como la Constitución o los códigos civiles y penales para marcar nuestra forma de actuar. Aquellos que necesiten hacer regir su conducta por algún tipo de texto sagrado no serán más que seres deshumanizados y carentes de su capacidad de raciocinio.


No necesitamos reglas escritas que restrinjan nuestra libertad con la excusa de que han sido escritas para evitar que cometamos errores. Ni injustos tribunales que, tomando como universales unos preceptos morales que no son otra cosa que la rancia y casposa moralidad represora de la clase dominante, nos impongan penas de represión por haber ejercido libremente nuestra voluntad, habiendo atentado únicamente contra los intereses de esa clase dominante y no contra los intereses y libertades de nuestros congéneres.


Continuaría, pero me vería obligado a gritar GORA MALATESTA!! interrumpiendo el pacífico descanso nocturno de mis congéneres-vecinos, y mi escrupulosa moral me lo impide.



sábado, 19 de enero de 2008

Traición

Sé que no debería hacerlo, sé que no debería poner su foto, sé que estoy atentando contra su inquebrantable voluntad de pasar desapercibido, pero de momento puedo prometer que no hablaré de él.
Intentaré resistir a la tentación de criticar duramente los contenidos melífluos y superficiales de ciertos blogs que hablan de él, intentaré vencer a la tentación de transcrbir en el blog lo que el escribió en pequeños papeles. De momento.

Amenazo con convertirlo en mi fetiche, en un ejemplo a seguir en la vida. Amenazo con obligaros e leerle. De momento amenazo, cuando se me hinche la vena stalinista, ya veremos lo que hago.

domingo, 13 de enero de 2008

Delirios

Hai tempo que non caio na delirante narración dunha historia insomne e vai sendo hora de sodomizar palabras, de facer agonizar frases vacías, de deleitar coas miñas putrefactas banalidades.
Espero producirlles arcadas, se non é así, fracasarei.

Corpo

Sentou no taburete e tenazas en man comezou o ritual.

Amputou os dedos dos pés, arrincou os testículos, reabriu as cicatrices, a golpe de navallazo sodomizou un recto poboadao de fracasos sexuais masculinos, rasgou unha uretra condeada á insensibilidade despois de longos anos de insatisfactorio onanismo, arrincou uns ollos defectuosos que o condearon á cegueira da luz que o rodeaba, extirpou cun torpe movemento de man unha lingua improductiva, taponou con balas uns oídos xordos...

E foi feliz, pois a perversa mente que coroaba o seu corpo reinaba libre de calquera inimigo disposto a contradicir as súas máximas vitais:
1- o corpo é un asasino en potencia que hai que destruir antes de que nos engane como serpe demoníaca con falsos praceres físicos
2- calquera pracer corporal é unha farsa, o único orgasmo real é o da lucidez

3- cando o cerebro sexa capaz de desprazarse no espazo-tempo sen a necesidade de pilotar un corpo, cando cerebro contra cerebro copulen intelctualemente libres de calquera atadura corporal, cando todo isto se produza, o ser humano alcanzará o seu estado supremo da existencia: A NADA.

Que é a vida senón a nada?



[Avante, 8 de decembro de 2008, 2:20 da mañá]

sábado, 12 de enero de 2008

Silencio

O silencio é a única forma de achegarse a un mesmo. Aqueles que se sintes solos cando están solos non coñecen ao ser que habita nos seus corpos, desprecianse a sí mesmos, pois non son capaces de atopar no seu propio ser a felicidade que buscan incesantemente nos demáis.
"Naces solo, mueres solo, no te engañes, solo vas viviendo". Algo así di unha canción de Los Suaves. Irrefutable verdade.

Lapidadas deberían ser esas nais que nos traen a un mundo caoticamente repulsivo.

Pero non nos enganemos, se no útero materno nos dixesen que durante esta patética estancia no planeta Decepción íamos coñecer a un onimaquiano extraño ser, a un adicto a sabina que consegue que un recupere a confianza no ser humano, a un invertebrado pirata que coa simple presenza aleda un día chusco, se nos dixesen iso, sairíamos correndo e sen lembrarnos de cortar o cordón umbilical, trotaríamos polo mundo arrastrando polo chan ás nosas nais en busca desas irremplazables presenzas.





[Avante, martes 8 de decembro de 2008, 1:50 da mañá]

Diario do licor café

Se agarra a la pegajosa mesa, clava sus codos en ella para no caerse del taburete y con el cuaderno abierto y la pluma en la mano se lanza al desgarro acelerado de un papel envejecido por el abandono en una habitación que apesta a tabaco y a sexo.

" Pode que a vida non me dea todo aquilo que desexe pero a estas alturas non aspiro a nada máis que a morrer dun ataque de alegría. Escribo borracho, sí, pero perfectamente lúcido, pois é este estado de embriaguez o que me permite enfrontarme conmigo mesmo sen medo a ofenderme, a cair na sensiblería barata e no típico victimismo que me acompaña"

Lúcido. Intenta darle un sorbo al licor café, el trago es demasiado largo, quema la garganta. Escupe, irradia medio chupito por el templo, mancha la entreperna de ese líquido viscoso y pañuelo en mano intenta remediar la estupidez como quien, temeroso de ser asaltado por el hermano con el que comparte cuarto, limpia avergonzado los restos de una polución noctura después de una pornográfica pesadilla. Mira alredor en busca de unos ojos recriminatorios. No los hay, no le prestan atención, puede continuar con el espectáculo. ¿Lúcido?, no, más bien lucido, que no es lo mismo.

"A infancia non foi o que quixera, a adolescencia unha estúpida ilusión que pasou sen que ningunha mareaxe puxese en perigo a calma na que sempre vivín. E a xuventude, hai tempo que perdín. Pero non me arrepinto, non miro ao pasado, este non é maís que unha bruma inespugnable que non quero atravesar pois o presente é mil veces máis prometedor que un tempo perdido por inconsciencia, por erro, polas ataduras da vida"

Una bruma inespugnable... pobre idiota, ¿como algo tan etéreo como la bruma puede ser inespugnable? Intento fallido de crear una imagen literaria potente. La potencia nunca será lo propio de un falo lisiado.

"Desexar aquilo que nunca chegará é o camiño directo á decepción" escribín hai tempo nalgún papel, por iso non aspiro a nada. Non vexo maís alá dos 40 anos, idade perfecta para desaparecer dun mundo despreciable, deixar unha sociedade repugnante seobre a que lanzaría sen ningún atisbo de culpa unha peste biolóxica que a fixese desaparecer despois de longos meses de agonía. ¿Qué é a sociedade? Unha estafa, unha multitude de individuos despreciábeis convertidos an máquinas facilmente manipulábeis pola execrable mente da perversidade. Non entendo as reglas polas que se rexe, non aprecio aquilo polo que os demáis a estiman tanto.

Son o que son, un individuo que acepta a súa condición de ser único e inigualable nun mundo de autómatas fabricados en grandes cantidades en escolas de estupidez, en institutos construidos polo Movemento onde o fundamental é demostrar quen manda, en facultades cheas de palurdos que dan clases de banalidade.

Non renego da especie á que pertenzo pois foi esta a que me distanciou da pérfida sociedade, a que me deu a coñecer a dor da lucidez: se fose estúpido sería feliz, mais dado que non o son disfruto da sadomasoquista sensación de que son un dos poucos bichos do planeta que sabe a ciencia certa que a vida é unha patraña, que madurar é descubrir que os que nos rodean son uns farsantes, que o pasado é un templo no que non hai que volver a entrar, pois a fe xa desapareceu e finxila sería mortificarse.

Pode que cruzase o límite, pode que o feito de estar escribindo nun ridículo caderno sentado nun taburete do Avante á 1:15 da mañá sexa entrar a formar parte deses tolos que poboan a paradisíaca cidade, mais, hai alguén máis lúcido que un pobre iluminado? hai alguén máis sincero que aquel que levado do impulso etílico di todo aquilo que pensa?

Non aspirpo a agradar a ninguén, non aspiro a que aqueles aos que aprecio e admiro me correspondan nesa admiración e aprecio, pois como lobo estepario, como individuo que acepta a súa condición de ser solitario, me basta admirar a aqueles que o merecen e apreciar a aqueles que foron capaces de alegrarme un día coa súa sinxela presenza. Non fai falta que o sentimento sexa recíproco, pois hai admiración máis sublime que a de aquel que respeta e idolatra a aqueles que o desprecian?

Non teño moi claro o sentido do discurso que intento trazar, mais, qué importa? Nada do que eu solte coa nasalizada voz que me condea ao eterno papel de paiaso secundario merece ser tido en conta, pois só falo conmigo mismo"

Como conductor borracho se lanza carretera adelante cambiando de carril constantemente y atropellando a todo aquel que sale a su paso, no hai discurso que trazar, no hai discurso, solo vacua palabría narcisista, nada que merezca respeto. Se agarra con más fuerza al taburete y con pose de pseudointelectual atacado por las musas se desploma sobre el caderno intentando continuar con la mecánica labor de oscurecer ojas en blanco.

"Escribir para que te lean é un delito. Escribir para exaltar os sentidos propios, despreciando calquera estúpida apreciación dos demáis é incumplir coa finalidade primixénea da literatura: crear aquela realidade na que un desexa vivir e facelo coa suficiente pericia como para que nos últimos suspiros vitais un non lembre a puta vida que levou senón aquela que inventou, aquela que anhelou e que só logrou vivir a través dos papeis que desgarrou con palabras vacías para os demáis pero fundamentais para un mesmo.

Nunca poderemos chegar a comprender na súa totalidade ao outro. É unha das conclusións ás que chega Camus. É certo, nunca chegarei a comprender na súa totalidade o que son os demáis, mais albiscar pequenos elementos que me permiten achegarme á esencia vital deses outros é xa o suficiente como para sentir un mínimo aprecio por eles. Nunca me movín polas grandes masa humanas senón por eses reducidos grupúsculos de bichos raros que poboan o mundo, e, para qué negalo, unha soa persoa pode facerme máis feliz coa súa presenza (só a presenza, nada de palabras, nada de xestos) que unha turbamulta de admiradores hipócritas.

Non aprecio en exceso a vida, morrer mañá non sería unha grende traxedia, pois palmaría lembrando as caras de aqueles que foron capaces de demostrarme que a vida, coas súas tediosas facturas, pagaba a pena"

Y se quedó tan ancho, como si hubiese revolucionado el panorama literario, como si hubiese hecho algo más que enlazar esa serie de banalidades que tiene por principios en una noche de borrachera. Como si hubiese dejado de ser el insignificante ser que aspira a ser.



(Mira Les eu tamén son capaz de escribir artigos interminábeis!)

[Avante, martes 8 de decembro de 2008, 1.15 da mañá]

Cascanuezes


E sentido ganas de darle al cuerpo el plazer que mereze y abrenuezes en mano e comenzado: después de provokarme la nezesaria erekzión a base de arañazos de gata negra en el eskroto, e rodeado el glande con el cascanuezes y e comnezado a frikzionar con fuerza el triste falo.

Se me a ido la mano.

Ya no tengo prepucio.

Ni tan siquiera piel.

No sé que hacer. Echar a correr?









viernes, 4 de enero de 2008

Jinetes del apocalipsis


Última noche del año 2007, un año hebrio de buena vida burguesa: levantarse tarde, pasar por clase para saludar a la gente y rememorar aquellos gloriosos tiempos de vida contemplativa, alguna partida de cartas, noches de lucidez intelectuall en el Avante...

Faltan unos segundos para que empiecen las campanadas y, con el propósito de empezar bien el año, fijas tu mirada en la pantalla de la televisión para no ver lo que te rodea: a la derecha ( siempre a la derecha, a la dereha incluso del Generalísimo, a la derecha incluso del Señor ) el que dice ser tu padre utiliza un cuchillo de punta fina para escarbarse los dientes en busca del Arca Perdida; a tu izquierda, la que supones que es tu madre por la mala hostia que os caracteriza agoniza sobre la mesa mientras con malicia ha empezado ya a comerse las uvas para poder celebrar que ha acabado antes que todos nosotros, maldita furcia!!

Miras las pantalla, agarras el manojo cutre de uvas envueltas en papel de aluminio y comienzas a tragar. Vas bien, una uva por campanada, todo parece indicar que por una vez en la vida vas a cumplir con la puta tradición.

Pero era sólo un estúpido pensamiento vanidoso de un pobre imbécil.

Te habías olvidado de él, estaba apenas unos centímetros fuera de tu campo de visión pero hace unos segundos que lo ocupa por completo: las babas se le caen por el cuello, restos de uva salen de su boca que intenta cerrar como puede para no echar los doce inocentes frutos de la inocente vid al putrefacto mundo de la tradición navideña. Tu primo.

"Dios, no creo en ti sobre todas las cosas, pero hazme un favor: mátalos!!" piensas mientras desvias la mirada y proteges tus ojos de tamaño belén dantesco.

Pero aun falta lo mejor de todo: ya son las doce, los fuegos de artificio empiezan a bombardear el tenebroso cielo "da cidade olívica" ( que diría o pantasmal creador da Dor Pantasma ) e sen ter tempo de reaccionar a fiestra da cociña se retorce de pánico ante o bombardeo de foguetes que caen sobor ela. Son eles, os putos veciños, os cabróns de sempre??? queren reventarme os timpanos??? Si, son eles, e non satisfeitos con poñer en perigo a túa saúde, cando saes ao balcón para recriminarlles a súa criminal actitude, cantan, todos ao unísono, a coro, pegando saltos de alegría: míralos, míralos, míralos, como se acojonan, como se acojonan!!!

No les basta con haber revestido las paredes de su casa de mármol negro, no les llega con haber bautizado su dulce hogar con el ridículo nombre de "la negrita". No, ahora tienen que venir a provocar a aquellos a los que nin tan siquiera se han dignado a saludar en los pocos meses que llevan viviendo justo al lado. La vena stalinista sale a flote: " acojonarme yo por un par de fueguchos de mierda!! yo!! cago en su puta madre!! tocarle los huevos a un stalinista no sale gratis!! van a saber esos hijos de puta lo que es acojonarse!!! les voy a plantar unh gulag en "la negrita" y van a ver lo que son fuegos y bombas!!! HIJOS DE PUTA!!!

Y la traca final. Ya te has calmado un poco, estás sentado a la cabeza de la mesa mientras todos miran la televisión y el triste humorista que la habita intenta hacer reir a la gente: para que los hombres dejen de fumar, en lugar de poner eso de "fumar perjudica la salud" deberían poner algo así como "fumar acorta el pene".

Y se giran todos hacia ti, repiten en voz muy alta "acortar el pene" y entonces estallan en carcajadas y se retuercen de placer.


Ahí están, los tres jinetes del apocalípsis: la Familia, la Burguesía, el Urólogo.


Menos mal que quedan ellos, están lejos pero están y gusta saber que están.
Menos mal, piensas poniendo cara bogartiana, que siempre nos quedará Compostela.





( los jinetes del apocalipsis son cuatro, lo sé. La familia, la burguesía, el urólogo y me faltaba un cuarto, pero pensándolo bien, ese cuarto jinete debo ser yo en estado misantrópico-stalinista. Así pues, ya estamos todos)